La hipocresía del PP con la Ley de Igualdad
Acaba de hacerse pública la decisión del Tribunal Constitucional de rechazar todas las impugnaciones realizadas por el PP contra el PSOE en relación al cumplimiento de la Ley de Igualdad y las condiciones de paridad en nuestras listas electorales.
Es evidente la mala fé, la hipocresía y la utilización fraudulenta que el PP ha hecho de una Ley que no apoyó el día de su aprobación, cuyas medidas de paridad ha rechazado públicamente y que ahora usa para hacer parecer que el PSOE no cumple con la presencia de mujeres, cuando en la mayor parte de los casos impugnados se trataban de listas en las que había un mayor número de mujeres, sobre todo en restos y suplentes.
El PP ha rayado en lo ridículo al impugnar listas del PSOE como las de Algete (Madrid), en el que hubo una errata de impresión en el Boletín Oficial Provincial y se cambió el nombre de una mujer por el de un hombre. A sabiendas de conocer tanto el error, como a la persona, el PP de dicha localidad insistió en interponer el recurso.
Otro ejemplo llamativo de la estrategia seguida por el PP en toda España, con toda seguridad por orden expresa de su dirección nacional, es el caso de El Boalo (Madrid) en el que la lista socialista sólo tiene un puesto de suplente, ocupado por una mujer y el PP alegó que este tramo no era paritario.
Al PP no le interesa la democracia paritaria, ni promover la presencia de las mujeres en la política, sólo busca hacer ruido con titulares de prensa engañosos, con el único propósito de continuar mintiendo y manipulando porque no tiene nada que ofrecer a la gente. Es lamentable para la democracia española este continuo juego sucio, que los tribunales hoy y pronto la ciudadanía, colocarán en su sitio.
A pesar de los continuos obstáculos del PP, vamos a conseguir el principal objetivo marcado por esta innovadora ley que consiste en que haya una representación equilibrada de hombres y mujeres también en la política. Así, gracias a esta iniciativa socialista aumentaremos en más de 8.000 mujeres la presencia de concejalas de todos los partidos políticos con respecto a las elecciones del 2003 ya que, teniendo en cuenta la proporción exigida del 40%-60% de representación de ambos sexos, pasaremos de las 15.453 concejalas actuales a más 24.000 como mínimo.
Es evidente la mala fé, la hipocresía y la utilización fraudulenta que el PP ha hecho de una Ley que no apoyó el día de su aprobación, cuyas medidas de paridad ha rechazado públicamente y que ahora usa para hacer parecer que el PSOE no cumple con la presencia de mujeres, cuando en la mayor parte de los casos impugnados se trataban de listas en las que había un mayor número de mujeres, sobre todo en restos y suplentes.
El PP ha rayado en lo ridículo al impugnar listas del PSOE como las de Algete (Madrid), en el que hubo una errata de impresión en el Boletín Oficial Provincial y se cambió el nombre de una mujer por el de un hombre. A sabiendas de conocer tanto el error, como a la persona, el PP de dicha localidad insistió en interponer el recurso.
Otro ejemplo llamativo de la estrategia seguida por el PP en toda España, con toda seguridad por orden expresa de su dirección nacional, es el caso de El Boalo (Madrid) en el que la lista socialista sólo tiene un puesto de suplente, ocupado por una mujer y el PP alegó que este tramo no era paritario.
Al PP no le interesa la democracia paritaria, ni promover la presencia de las mujeres en la política, sólo busca hacer ruido con titulares de prensa engañosos, con el único propósito de continuar mintiendo y manipulando porque no tiene nada que ofrecer a la gente. Es lamentable para la democracia española este continuo juego sucio, que los tribunales hoy y pronto la ciudadanía, colocarán en su sitio.
A pesar de los continuos obstáculos del PP, vamos a conseguir el principal objetivo marcado por esta innovadora ley que consiste en que haya una representación equilibrada de hombres y mujeres también en la política. Así, gracias a esta iniciativa socialista aumentaremos en más de 8.000 mujeres la presencia de concejalas de todos los partidos políticos con respecto a las elecciones del 2003 ya que, teniendo en cuenta la proporción exigida del 40%-60% de representación de ambos sexos, pasaremos de las 15.453 concejalas actuales a más 24.000 como mínimo.
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